¿Qué es el Baby Led Weaning?
Una de las dudas más comunes entre papás y mamás es cuándo y cómo introducir la comida sólida en la alimentación de tu bebé. La Organización Mundial de la Saluld (OMS) recomienda que durante los 6 primeros meses el bebé sea exclusivamente lactante. Sin embargo, a partir de los 6 meses permite incorporar nuevos alimentos a su dieta como complemento a la leche.
Cada vez son más los padres y madres que se suman al Baby Led Weaning (BLW) para introducir de otra forma la alimentación complementaria en los peques de la casa.
¿Quieres saber cómo funciona esta nueva técnica y cómo convierte al bebé en el protagonista a la hora de comer? Te lo explicamos todo en este post y, además, al final te contaremos algunas de nuestras recetas favoritas para comenzar esta nueva etapa de tu bebé con el mejor sabor de boca posible. ¡Comencemos!
¿Qué es el BLW?
El Baby Led Weaning (BLW) es un método de introducción de alimentos complementaria basado en la autogestión del propio bebé.
Con el BLW se le introducen los alimentos sólidos poco a poco al bebé (de manera complementaria a la lactancia) en lugar de ofrecérselos triturados, (en papilla o puré). El bebé coge los alimentos con la mano y elige lo que quiere comer, cuánta cantidad y a qué ritmo, lo que le permite descubrir mejor los sabores, las texturas, los olores y los colores de los alimentos.
El método BLW se basa en unas premisas muy claras:
- Se le ofrecen al bebé alimentos sólidos blandos (correctamente preparados) en vez de purés.
- La comida se dispone en la bandeja de la trona o en un plato y es el propio bebé el que la coge con las manos y se la lleva a la boca.
- No se le obliga a comer ni se le mete nada en la boca.
- Se aprovechan las comidas familiares para que el bebé coma lo mismo por imitación.
Este cambio en la apreciación de la comida del bebé supone la aceptación por parte del pequeño de un mayor grupo de alimentos, una dieta mucho más sana y variada, el fortalecimiento la musculatura de la boca, la coordinación ojo-mano, y en definitiva, contribuye a su desarrollo psicomotriz.
Es importante supervisar al bebé en todo momento. No podemos confundir el BLW con el desentendimiento de los padres / cuidadores del bebé.
¿Cómo sé si mi bebé está preparado para iniciar el método BLW?
Antes de iniciarse con el método BLW, es necesario comprobar que el bebé tiene las destrezas necesarias para iniciarse en la alimentación complementaria (en caso de duda consulta siempre con tu pediatra):
- El bebé debe poder mantenerse erguido por sí mismo
- No debe presentar reflejo de extrusión. Este reflejo llevaría al bebé a expulsar de su boca los alimentos (es un mecanismo de defensa natural contra el atragantamiento, pero suele desaparecer alrededor de los 5 meses).
- El bebé debe mostrar interés por los alimentos
- Debe ser capaz de agarrar cosas y llevárselas a la boca
Aunque el bebé no tenga dientes, a partir de los 6 meses aparece el reflejo masticatorio de ascenso y descenso de la mandíbula. y, por lo que,de ascenso y descenso de la mientras estaba siendo alimentado con leche, ya ha estado entrenando la forma de masticar por la succión. Es por eso que a partir de los 6 meses los bebés suelen estar preparados para ingerir alimentos sólidos sin peligro.
Con el método BLW se pretende que el bebé participe en el proceso de comida, eligiendo qué quiere y qué no, motivando su voluntad de probar cosas nuevas y de familiarizarse con la comida tal y como es, no solamente con un puré.
Por ello, si quieres seguir el método Baby Led Weaning debes ponerle a su alcance comida saludable. Deja que investigue, que huela y observe las formas y colores. Ofrécesela tú o deja que la coja con las manos. Te recomendamos que, al comienzo, le ofrezcas comida blanda en para que chupe sin miedo a que se atragantaterse. A partir del primer acercamiento, podrás ir variando el tamaño de los alimentos y su consistencia.
Es importante introducir los alimentos de uno en uno y siempre durante el día, no en la cena. Así, si el bebé tuviera alguna reacción alérgica, sería fácil conocer el alimento involucrado y reaccionar lo antes posible.
También es importante que, durante toda la comida, el bebé tenga a su disposición agua. Si tu bebé se alimenta de leche materna, quizás la rechace, pero no pasa nada. Muchos bebés lactantes prefieren regularse ellos mismos con el pecho haciendo tomas cortas y frecuentes. Así ingieren la parte de la toma materna más aguada: la del comienzo. La leche deberá seguir siendo su principal alimento hasta el primer año, por lo que no tienes que reducir sus tomas. Ofrécele el pecho a demanda y deja que el bebé marque el ritmo. Poco a poco irá reduciendo la cantidad conforme aumente la ingesta de sólidos.
Medidas de seguridad
Uno de los mayores miedos de papis y mamis a la hora de llevar a cabo la BWL, es el atragantamiento. Como hemos comentado antes, podéis estar tranquilos(*): tu bebé tiene mecanismos de defensa innatos que actúan cuando se atragantan para expulsar la comida que no pueden ingerir. Atragantarse no es lo mismo que ahogarse.
Cuando empiezan a comer sólidos es natural que los bebés se atraganten de vez en cuando, igual que se caen cuando aprenden a caminar, pero suelen tener arcadas para expulsar los alimentos. Esto no quiere decir que le puedas dejar solo o desatendido a la hora de comer.
(*) Aunque el riesgo de asfixia es muy improbable, existe. Nuestra recomendación es que antes de iniciarte con el método BLW hagas un curso de primeros auxilios en atragantamientos. Es importante tener los conocimientos para actuar sin entrar en pánico ya que puede suceder y no solo con comida.
¡Pero no te agobies! A continuación te detallamos una serie de consejos para minimizar los riesgos con el método BLW.
- Sienta al bebé erguido. Su espalda debe estar recta y frente a la mesa. Si su postura es estable y puede utilizar manos y brazos con total libertad, está listo para comer. Utiliza una trona adecuada a su edad que le permita tener una posición elevada y segura para poder ver todo lo que ocurre a su alrededor. La bandeja te permitirá poner a su alcance los alimentos. Un consejo: si quieres reducir un poco las manchas que causarán su acercamiento a la comida sólida, utiliza un babero impermeable, como los que tenemos en Gabis. Son fáciles de lavar y te ahorras unas manchas extra en la ropita.
- ¡Deja que coja la comida con la mano! Todavía no va a saber utilizar los cubiertos y se puede hacer daño con ellos. Simplemente, deja que tu bebé coja los alimentos con sus manos, que los huela y note las distintas texturas. Además de sabores, durante esta etapa también aprenderá a establecer una relación sana y agradable con la comida. Será su primer contacto con ella y percibirá la variedad de alimentos que existen.
- Alimentos con textura y tamaño adecuados. A la hora de ofrecer un alimento, hay que tener en cuenta el corte y la cocción de las verduras y frutas para evitar posibles sustos. Te recomendamos que comiences con alimentos blandas cortados en trozos alargados que superen el tamaño de su propio puño para que vaya chupando sin miedo a que se atragante (patata cocida, brócoli, trocitos de calabaza, boniato asados, etc.). Con el paso del tiempo aprenderá a hacer la pinza con los dedos para comer alimentos más pequeños (guisantes, arroz, etc.) y después aprenderá a dominar el arte de la cuchara.
- No le obligues a comer. Esta es una de las reglas fundamentales del Baby Led Weaning: jamás debes forzarle a comer. Puedes, sin querer, meterle un trozo de comida demasiado grande o profundo como para que tu bebé lo pueda gestionar. Esto solo llevará a enfado y a negación a seguir comiendo, algo que no queremos. Como su alimento principal sigue siendo la leche, no te preocupes si no come mucha cantidad. Es más importante que se familiarice y que establezca una buena relación con la comida. Puede que al principio solo quiera experimentar y jugar con la comida.
- No distracciones. Si se distraen el riesgo de atragantamiento aumenta. No dejes que se distraiga ni le distraigas tú cuando esté comiendo. Hay que dejar que se concentre. Es el bebé el que marca el ritmo, no hay que meterle prisa, pero déjale claro que la comida no es un juego, por lo que, en los momento en los que está en la mesa, no se puede jugar ni encender la televisión.
- No le dejes solo comiendo. Un adulto debe vigilarle siempre y durante toda la comida. Aunque muy poco frecuentes, los accidentes ocurren. Si estás junto a tu bebé y no le pierdes de vista, podrás solucionarlo rápidamente.
10 alimentos para comenzar con el Baby Led Weaning
En nuestro primer acercamiento al BLW es normal no saber qué darle a nuestro bebé. Para que tengas un poco de ayuda en esos momento, hemos preparado una lista de alimentos sanos e indicados específicamente para empezar con el Baby Led Weaning. También tendrás algunas recomendaciones de preparación y consejos sobre cómo ofrecerlos:
- Boniato, patata, calabacín o calabaza (cocidos o asados en tiras). También se los puedes ofrecer en trozos grandes, (del tamaño de su manita).
- Judías verdes
- Brócoli. No lo cuezas demasiado para que no se le deshaga en la mano.
- Zanahoria (cocida o asada y en tiras).
- Aguacate en medias lunas. Lo mejor es dárselo maduro para que perciba distintas texturas, lo aplaste y lo chupe para descubrir un nuevo sabor.
- Pan sin sal (trozos un poco más grandes que su puño).
- Arroz sin sal.
- Macarrones cocidos.
- Melón o sandía en tiras.
- Plátano. Los trozos tienen que ser lo suficientemente grandes como para que no pueda metérselos enteros en la boca.
No te agobies los primeros días si tu bebé juega con la comida. Está descubriendo algo nuevo, experimentando con su textura y sabor. Para ellos, los estímulos sensoriales son una fuente rica en información. ¡No te desesperes!
Te dejamos también una lista de aquellos prohibidos para los bebés menores de 1 año. Debes tenerlos muy en cuenta si quieres comenzar el método Baby Led Weaning:
- Sal (no es buena para los riñones de los bebés).
- Azúcar. Si quieres endulzar, utiliza el azúcar propio de la fruta, pero evita los zumos de fruta.
- Miel. Contiene una cantidad de azúcar similar al azúcar blanco.
- Frutos secos enteros (pueden causar atragantamiento en el bebé).
- Los pescados y mariscos que contienen una alta cantidad de mercurio., por lo que no es aconsejable.
- Carne, pescado o huevo poco hecho (pueden generar infecciones en los bebés).
- Hortalizas de hoja verde. Hay que vigilar su ingesta por la cantidad de nitratos que contienen de manera natural.
- Algas (contienen mucho yodo).
- Alimentos superfluos, como, bollería, mermeladas, cacao, chocolate, postres lácteos, galletas, embutidos…
- Leche de vaca, recomendada a partir del año de vida.
- Carne de caza, completamente desaconsejada a menores de 6 años, ya que es carne de animales cazados con munición de plomo.
Nuestras recetas favoritas
Llega una de nuestras partes favoritas: ¡las recetas! Todas ellas están pensadas para bebés y su alimentación complementaria. Hemos elegido 3 recetas en total (primero, segundo y postres), pero hay muchísimas con miles de ingredientes para que tu bebé se lo pase pipa descubriendo nuevos alimentos. Comencemos con el primero:
Cuscús de brócoli.
Su preparación es súper sencilla y no te llevará más de 15 minutos. Necesitarás:
- 400g de brócoli.
- 20g de cebolla.
- Un diente de ajo.
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Lava el brócoli, córtalo en trozos y quita la parte de los troncos dura. Ponlo en una picadora (batidora o manual) y pícalo hasta que quede desmenuzado y tenga una textura granulada. Buscamos que parezca cuscús. Corta la cebolla y el diente de ajo en trozos muy pequeños. En una sartén a fuego medio, pon un chorrito de aceite y saltea la cebolla y ajo unos 2 minutos, hasta que estén hechos.
Añade el brócoli a la sartén y un poco más de aceite de oliva. Saltea durante 5 minutos sin dejar de remover hasta que esté hecho. ¡Listo! Solo falta ponerlo en un cuenco y esperar a que esté tibio antes de ofrecérselo a tu bebé.
El brócoli es una verdura muy nutritiva, rica en vitamina C (¡contiene incluso más que una naranja!) y cuenta con un montón de propiedades cardioprotectoras, antioxidantes y además previene el estreñimiento. Los bebés suelen admitir muy bien la comida en este formato falso cuscús y puedes añadir más alimentos cortados muy pequeñitos para sofreírlos a la vez que la cebolla y el ajo (calabacín, pimientos, etc.)
Tortitas con garbanzos y zanahoria
¡Irresistibles! ¿Y lo mejor? Su preparación es súper simple. Para hacerla necesitas:
- 100 gr de garbanzos cocidos
- 50 gr de zanahorias cocidas
- 50 ml de leche (materna, de fórmula o de vaca, en función de la edad de tu bebé).
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
- Pela la zanahoria, córtala en trozos y ponla a cocer en un cazo con agua durante 15 minutos o hasta que esté tierna.
- Tritura los garbanzos y la zanahoria cocida y ve añadiendo la leche poco a poco hasta tener una mezcla homogénea y semilíquida. Si queda demasiado espesa (si vuelcas el vaso de la batidora no cae) añade algo más de leche.
- Calienta una sartén a fuego medio-alto con un poco de aceite de oliva. Es importante que sea una buena sartén antiadherente para que no se peguen las tortitas.
- Vierte un poco de la masa en la sartén con una cuchara sopera o directamente desde el vaso de la batidora de poquito en poquito. La masa se extenderá hasta formar un círculo. Cocina hasta que aparezcan burbujas en la superficie de la tortita y entonces ya puedes darle la vuelta. Cocina otro minuto más.
- Repite hasta terminar toda la masa.
- Cuando las tortitas estén tibias ya puedes ofrecerlas a tu bebé combinadas con compota, crema de frutos secos, yogur… ¡Le van a encantar!
El postre
Que los bebés no puedan tomar azúcar no significa que no puedan disfrutar del siguiente postre, un súper bizcocho de avena y plátano sin azúcar. Tardarás un poco más en hacerlo, pero vale la pena. Necesitarás:
- 250g de harina de avena.
- 3 plátanos muy maduros.
- 2 huevos grandes.
- 80ml de aceite de oliva virgen extra.
- 1 cucharadita de levadura química.
- 1 cucharadita de extracto de vainilla.
- 1/4 cucharadita de canela en polvo.
Precalienta el horno a 180º con calor arriba y abajo. Pela los plátanos y en un cuenco machácalos hasta tener un puré. Pon en un bol los huevos, el aceite de oliva y la esencia de vainilla. Mezcla hasta que esté todo integrado. Vierte la mezcla en el cuenco con el puré de plátano y remueve. Echa la harina de avena, la levadura y la canela. Continúa removiendo con una cuchara de madera o espátula hasta tener una masa.
Unta un molde de bizcocho con aceite de oliva y espolvorea con harina. Vierte la masa y hornea durante 50 minutos. Cuando queden 10 minutos para sacarlo, tápalo con un poco de papel de aluminio. Pasados el tiempo, pincha con un cuchillo; si sale limpio, ya está hecho. Deja que el bizcocho se enfríe un poco y luego desmóldalo. Corta en porciones y dáselo a tu bebé para que lo disfrute.
Si no tienes tiempo para cocinar te recomendamos que eches un vistazo a la web de roots mindfoodness. Tienen la opción de suscribirte y recibir semanalmente la comida de tu peque. Elaborada con alimentos 100% orgánicos y adapatada a las necesidades alimentarias de tu bebé durante sus primeros 1000 días de vida
¿Qué opinas del Baby Led Weaning? ¿Te animas a probarlo? A nosotros nos encanta este nuevo acercamiento a la comida, poniendo al bebé como protagonista y dejando que experimente y perciba a su tiempo. Y, si se mancha, ¡tampoco pasa nada! En Gabis tenemos todo tipo de accesorios impermeables para tu bebé, tanto para ir de paseo como para estar en casa. Si tienes alguna duda o estás buscando un producto para tu bebé en concreto, puedes ponerte en contacto con nosotros. ¡Te ayudaremos en todo lo que podamos para que tu bebé sea el más feliz del mundo!